lunes, 19 de noviembre de 2012

Trenes

Aqui no pone cual es la siguiente parada cuando te subes a un tren. ¿Imaginas lo aburrida y monótona que sería la vida si cada vez que nos embarcamos en una historia supiesemos donde se acaba el trayecto?
Cuando te conocí nunca supe a que velocidad seria el viaje ni, si quiera, su duración. Solo supe que podia descarrilar en cualquier momento, que tus ojos no son buenos copilotos, y que tu voz no sirve de gps. Nunca quise averiguar si nos bajariamos en la misma estación o si yo desistiría y me iria en busca de otro tren que supiera valorar estas manos...
Ahora que te despido desde el andén veo como echas la vista hacia atrás y buscas el freno para que tu tren pare en seco. Recuerda que frenar de golpe a gran velocidad puede suponer para ti perderlo todo, incluso lo poco que te queda de mi. Sigue tu viaje y si algún dia volvemos a coincidir recuerda que hubiese descarrilado mil veces a tú lado, que hubiese perdido mil trenes si en los siguientes estabas tú. Y no olvides que desde el principio supe que, aunque no me supiesen guiar, siempre iba a seguir con la mirada a eso ojos verdes que me hicieron reducir drásticamente la velocidad cierto dia de mi vida..