martes, 18 de junio de 2013

Ambiciones

Mis ambiciones hoy por hoy no pueden medirse por euros, ni por metros cuadrados, ni por centimetros de melena bajo mis sábanas. Mi única ambición hoy por hoy es la de fotografiar al del espejo y ser mejor de lo que era ayer. No más guapo, no más rico, no más afortunado. Mejor. No sé si me explico.
Ser mejor desde que saco un pie del colchón donde forjo mis sueños hasta que lo vuelvo a introducir después de haberlos cumplido.
La mejor forma de conseguir los sueños es ir poniéndote metas fácilmente alcanzables cada día. Sí. Sonreir más, y mejor. Hacer reir más, y mejor. Ayudar más, y mejor. Si te pones un gran objetivo y te olvidas de los pasos que ir cumpliendo cada día te desmotivarás al empezar y seguir en el mismo sitio. Mi ambición no se trata de competir con el de al lado, sino de competir con el que tengo dentro.
Y creo que es la mejor forma de crecer. ¿Cómo vas a luchar y compararte con alguien que no ha dado los pasos que has dado tú? Sería injusto. Para ti y para el otro individuo. Lucha contigo mismo, sé mejor persona, mejor amigo, mejor hermano, mejor de lo que eras ayer.. En todo.
Pero si algún día tienes que dar un paso atrás para aprender un poco más, no tengas miedo. Es bueno corregirse a uno mismo.
Y ya, no tengo más ambiciones. Llámenme conformista, aburrido o cualquier otro adjetivo que a ustedes les apetezca pero, como sé que ninguna otra persona podría llevar mi vida como la llevo yo, esta es la ambición más grande que podré tener toda la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario